EL PASO DEL COMETA
A
la tía Ángela
La vida es un cometa de una larga cola,
Pasa rauda por nosotros regando: lentejuelas,
zafiros y destellos.
Es la vida una serpentina de colores que se va difuminando cuando pasa
Es la vida una serpentina de colores que se va difuminando cuando pasa
y va dejando música y rocío.
A veces lágrimas, sudor en forma de cristales o
lluvia que fertiliza lo que hacemos.
Esta vida que es un instante del existir con que nos han premiado,
Esta vida que es un instante del existir con que nos han premiado,
no se agota con el paso del cometa por
nosotros.
Continúa su elíptico danzar por sobre el tiempo
entero,
sobre el espacio que se expande y se
expande y siempre es nuevo.
Los cometas se acercan luminosos.
Los cometas se acercan luminosos.
Su paso es esplendido y se alejan arrebatando
en su tornado a algunos de nosotros.
Los que miramos sentimos las llegadas, las ausencias y las despedidas.
Los que miramos sentimos las llegadas, las ausencias y las despedidas.
Pero una esperanza sembrada no sé dónde,
muy dentro de nosotros,
hace que siempre elevemos la mirada buscando la
estrella más brillante.
Pues puede ser la estela del cometa que viene a
recogernos
para llevarnos junto a aquellos que amamos
y que confiados esperan por nosotros.
Y juntos en novísima manera de existir,
Y juntos en novísima manera de existir,
seremos:
estelas de cometas,
lentejuelas,
brillantes cristalitos de vidas renovadas
ilusión en las miradas que en las noches
estrelladas
esperan sorprenderse estremecidas
con la nueva llegada del cometa.
León M.N. Nov. 28 de 2014.
No hay comentarios:
Publicar un comentario