GRIS
Gris un
paisaje de invierno en la mañana,
El chillar
huérfano aventado del nido por la ráfaga.
Es de
plumaje gris y humedecido.
Y gris un
sol tímido y tardío.
Grises los
pliegues de las ruanas blancas
en butacas
al tibio sol en los corredores del asilo.
Grises
transcurren sus días, sus caldos,
sus
recordadas canciones, sus olvidos.
Gris la
neblina que ronda las calles empedradas.
El manto de
la viuda que hace madrugar la gris campana.
Gris ese
perro flaco que cojea el rabo entre las patas
sorpresiasustado
su gris mirar y lagañoso.
Gris el
anónimo andar de la beata que en la
noche
recorre los
pasillos, murmura una oración gris.
ora recoge
una cobija, ora da de beber, ora suplica.
Recoge su
trasnocho y se le ve regresar por gris camino.
Gris la
llovizna lenta, taciturna que empaña ventanales
Gris
silencioso el lento transcurrir del día,
de autos y
de coches tirados por caballos grises
y de
personajes grises delante a mi ventana.
Gris es la
sombra que tienen los peñascos.
Gris la paja
rala que apenas cubre la colina.
Gris la piel
del cactus que se eriza agresiva.
Gris pálido
la lejana montaña y la niebla y la nube.
Gris el
atardecer, anochecer, la madrugada
Gris la
vigilia, el recuerdo y el desvelo.
El ataúd
gris y la mortaja, el réquiem, la lápida y la tumba
Y gris el
recuerdo borroso de estos versos.
León M.N.
No hay comentarios:
Publicar un comentario